A pesar de estar organizado por asociaciones cercanas a la izquierda abertzale, muchos pensamos que la presencia de importantes líderes internacionales se traduciría en una exigencia a ETA para no solo un cese el fuego sino una disolución de la Banda Armada.
A partir de hay, comenzaría una nueva etapa política y social en el País Vasco, y estas personalidades podrían aportar su experiencia en la obtención de esas "recetas" que nos permitiesen llegar la la normalización política y social de nuestra tierra.
Sin embargo, o no se habían estudiado mucho el tema o realmente no tienen fórmulas novedosas para avanzar hacia dicha normalización.
Hablar a estas alturas de Conflicto Armado es un insulto a las numerosas personas que han sufrido en Euskadi y fuera de Euskadi. Aquí ha existido una banda terrorista que ha tratado de imponer sus tesis políticas en base a la fuerza de las armas.
Ideas como la Euskadi Solialista, la anexión de Navarra, la conversión de ETA en el ejercito del pueblo, o la independencia no han sido logradas por el uso de la fuerza.La victoria frente a ETA se ha obtenido por la fuerza de un pueblo harto de tanta barbarie, y cansado de la falta de libertad. No quieran ponerse ahora algunos las medallas, y menos aún los que han convivido con el entorno violento.
El primer punto de la declaración hace un "llamamiento" a ETA, porque no se lo pedimos "por favor"? Debería ser una exigencia clara y rápida de la disolución del grupo terrorista. Después habla de dialogar sobre las consecuencias del conflicto, terminología totalmente ambigua que para la mayor parte de la ciudadanía queda vacía.
En el segundo, repite la misma vaga argumentación del primer punto. Siguiendo con el tercer punto, tampoco aporta nada nuevo a lo ya planteado múltiples ocasiones en Euskadi. Seguramente será una de las partes más difíciles.
Respecto del cuarto punto, creo que el más desafortunado, tampoco aporta nada nuevo en el panorama vasco, podría estar entresacado de cualquier declaración de intenciones de la Izquierda abertzale. Hacer demagogia con palabras como diálogo, consulta o facilitadores es muy sencillo.
En este país no se necesitan más divisiones, más confrontaciones, necesitamos que los representantes políticos, como representantes de la sociedad, logren puntos de acuerdo para facilitar un camino a recorrer. Es muy fácil hablar de consultas, pero ¿qué consultamos? ¿a quién? ¿cuando? ¿cómo? ¿Qué consecuencias podría tener? ¿Una división de la sociedad en dos partes?
Respecto de 5º punto, y por darle un tono de humor, parece que previamente pasaron por LANBIDE (Servicio Vasco de Empleo) y les recomendaron dejar su Curriculum.
En definitiva, quienes pensamos que este grupo de personas aportarían alguna novedad a la situación vasca, nos acostamos con una profunda decepción, pero sin resistirnos a la esperanza de que el mal sueño de ETA (algunos no conocemos Euskadi sin ella) tenga un final y pase a la historia.
Eso una historia que recuerde la verdad, que un grupo quiso imponer sus ideas por la fuerza de las armas y por encima de la opinión del pueblo vasco.
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